Vamos a dividir al trabajo en dos categorías.

Hay «trabajo», y luego hay trabajo real. «Trabajo» corresponde a emails, reuniones, y otras tareas administrativas que son técnicamente necesarias, pero que no contribuyen significativamente a tu éxito profesional.

El trabajo real, por otra parte, abarca los proyectos más grandes y las tareas que te ayudan a alcanzar tus metas y las de tu empresa. Es el tipo de trabajo que te atrajo a tu trabajo en primer lugar.

Esto de acuerdo con Laura Vanderkam, la autora de varios libros de gestión del tiempo y la productividad, incluyendo la más reciente, «Yo sé cómo lo hace». Vanderkam fue por la oficina de Business Insider el año pasado y compartió un consejo práctico para conseguir hacer más.

¿Cómo hacer más trabajo real?

En pocas palabras, programa una «hora de energía» a primera hora de la mañana, cuando trabajes sin interrupciones en un proyecto de máxima prioridad.

Esto no es tan fácil como suena, especialmente cuando llegas a la oficina y encuentras tu bandeja de entrada desbordada y a tu jefe diciendo de algo nuevo que tienes que hacer.

Pero si por lo menos no planeas en pasar los primeros 60 minutos de tu día en algo que te importe, puedes fácilmente encontrarte pasando varias horas respondiendo a tus emails o atendiendo cosas que no son necesariamente importantes o urgentes.

«Reconoce que ciertos aspectos del trabajo se expandirán para ocupar todo el tiempo disponible», dijo Laura, refiriéndose al correo electrónico en particular. «Tenemos que elegir conscientemente pasar menos tiempo con los emails y sacar tiempo para trabajar en lo que más nos importa.»

Para la mayoría de las personas, la mañana suele ser el mejor momento para trabajar en tareas de alto impacto. Como dijo el psicólogo Dan Ariely, tendemos a ser más productivos en las dos primeras horas después de despertarnos.

Una versión «pro» de esta estrategia, dijo Laura, es dedicar todo el lunes por la mañana a una tarea más grande que es más especulativa y requiere una reflexión profunda. Laura compara esta técnica con «pagarse a sí mismo primero», o poner tu dinero en una cuenta de ahorros antes de gastarlo en cualquier otra cosa.

«La semana puede alejarse de ti, y lo hará». «Surgirán cosas nuevas, pero al menos habrás dedicado ese tiempo a cosas que te importan.»