Algunos días (o semanas o meses), tienes tanto trabajo que te provoca estrés, cansancio y a veces, noches en vela. Aquí tenemos una estrategia que podría ayudarte para mantener la cordura en esos momentos.

William Harris escribe en Fast Company cómo lidia con semanas de trabajo de 80-100 horas, a veces trabajando de 8 de la mañana a 2 de la mañana o incluso más tarde de Lunes a Sabado.

La primera etapa de la mañana hace cosas simples como parte de un calentamiento antes de entrenar, sin tomar café.

La segunda etapa dura desde las 11 de la mañana hasta las 5:30 de la tarde y es para tareas complejas, cumplir objetivos y no tener distracciones. Ésta vez, con café.

Después de una cena rápida, es hora de volver a las tareas fáciles, como contestar a emails.

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Desde las 8 de la tarde hasta las 12, suele volver a hacer las tareas más complejas.

Finalmente, si es necesario, a partir de medianoche se dedica a pensar en y resolver los problemas más creativos.

Este tipo de idea de trabajar en etapas puede darte una idea de cómo puedes personalizarla para ti y tu horario cuando tienes días largos por delante. Por supuesto, si puedes evitar trabajar tantas horas, hazlo. Estarás más sano, feliz, y probablemente serás más productivo.

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